domingo, octubre 29, 2006

Un problema [est]ético

En los cursos que dicto, busco difundir entre mis estudiantes las bondades del software libre, junto con una actitud abierta a compartir la información, a apreciar y respetar lo público y a jugar limpio en esos aspectos.

El jueves pasado, en la última clase de la tarde (de 5 a 6), con la habitual inasistencia aleatoria que se presenta entre esos cursos, con dos estudiantes aprendíamos algo de abstracciones en programación (en Nyquist) y conversábamos acerca de las bondades o no bondades del software libre, cosa que les puse de tarea averiguar.

En un momento, uno de ellos me preguntó si yo usaba software pirata, a lo que le respondí que lo evitaba. Nada que hacer, uso un par de aplicaciones que legalmente no tengo. Pero son casos extremos, para poder leer los trabajos de mis alumnos o cosas así. Le dije que, salvo esos casos, me estaba pasando a aplicaciones libres y lo que no, compraba la licencia. Hasta mi M$ Office::Mac y el M$ Güindous que tengo en mi PC son legales, cosa muy rara en este país, y que aún teniendo el M$ Office en el Mac, prefiero usar NeoOffice (OpenOffice en el PC).

El me respondió que para que hacía eso, si igual todo el mundo lo hacía. Si por $15.000 el podía conseguir Cubase o Sonar, Windows, Office o Finale. ¿Si se puede, pues por que no hacerlo?

A eso le respondí que bien, si esa es la actitud, saltémonos las bardas de Transmilenio para entrar gratis, pasémonos el semáforo para llegar antes, robémonos las cosas que podamos en los mercados públicos, evitemos pagar impuestos, compremos contrabando, copiémonos en los exámenes, falsifiquemos los papeles, colémonos en las filas y por que no, matemos al que se interponga en nuestro camino, si no se dan cuenta no hay problema...

Mi alumno dijo que no era para tanto, que una cosa es tener un windows pirata y la otra era matar a alguien, a lo que le respondí que esa apatía frente a las normas de convivencia era lo que hacía que la gente terminara en ese grado de desidia, andando sin ser consciente del otro y atropellando sin pensar. Mi alumno dijo "pero, pero, es que, ah" y bajó la mirada.

La verdad no quería hacerlo sentir regañado, sino hacerlo caer en cuenta que la sociedad humana es un juego con reglas y que si estas son absurdas, la mejor manera de trascenderlas es andando en un sistema alternativo -como lo de la información libre-, que sea de beneficio para la comunidad, no rompiéndolas para obtener lo que uno quiere.

Mucha gente hace cosas sin tener claras las consecuencias y personalmente, siento que no hay mucha diferencia entre posturas estéticas y posturas éticas. Una de las labores del artista es hacer al espectador consciente de su entorno y la labor de éste no sólo se limita a la obra, sino a la vida.

sábado, octubre 28, 2006

Artetainment - edición institucional 1.1

En esta nueva edición de Arteteinment, actualizo y confirmo lo que consideré inicialmente un rumor macabro difundido por una revista, una inocentada antes de tiempo. El cuadro conjunto de Alvarín Skywalker y Don Fernandito.

No era un rumor macabro, sino un hecho confirmado por un medio de comunicación favorable a uno de los coautores del colorido lienzo, lo que aumenta su 'macabrez'.

Como a don Fernandito los museos prefieren no comprarle ("que oso" imagino que dicen los curadores), y además ya saturó las personas a las que les podía dar cuadritos de Abu Ghraib a manera de postales, le quedan dos opciones más la nueva opción:
  1. Recurrir a los coleccionistas lobos con bolsillo de traqueto o similar.
  2. Donar lo que pueda furtivamente al museo incauto que se deje.
  3. Reunirse con otro personaje con características similares y hacer una obra conjunta a ver si ésta coge algún valor -ya que artístico no tiene.
El valor de la venta de este cuadro se destinará a la Fundación Matamoros, que se dedica a ayudar a huérfanos, viudas y mutilados del ejército y el precio base de la subasta en el Club el Nogal es de US$450.000.

¡¡¡Cuatrocientos cincuenta mil dólares estadounidenses!!!

Eso puede no ser demasiado para uno de los coleccionistas de la opción no. 1, pero para mucha gente aquí en Colombia, de hecho, para casi toda, es una cantidad de plata inconcebiblemente grande. Pero comparada con las ganancias que produce el negocio de la guerra civil, la droga, el ganado y la extorsión no es mucho. También para los empresarios amigos de los dos "artistas" que buscan pagarle menos a la nación hay beneficios que pueden derivarse de gastar un billetal en la obra a dos firmas.

Durante una charla con colegas esta tarde alguno expuso que era una manera muy fácil de lavar dinero. Puede serlo, pero el problema principal no es que laven la plata, ni que el Mesías-Caudillo-Artista evidentemente relacionado con los grupos interesados en lavar plata se preste para esto, sino que sigan quieriendo tapar el sol con un dedo.

Para evitar huérfanos viudas y mutilados hay que parar la guerra. Para parar la guerra hay que hacer muchas cosas, pero básicamente (perogrullada a la vista):
  • Educar a la gente en muchos aspectos: lo público, la tolerancia...
  • Legalizar y tomar todas las medidas tributarias y diplomáticas del caso...
Casi nada, ¿no? Pero más barato a largo plazo que la guerra sin principio ni propósito.